Desde que te fuiste...
No te echo de menos.
Mis mañanas son las mismas,
mismas son mis tardes
y en las noches de resaca,
siguen quedando
Al amanecer
besos en la almohada.
Desde que te fuiste
no te echo de menos.
La casa parece más desordenada.
He dejado olvidada la escoba
en el armario de las telarañas
El pasillo
sigue estrecho
y el balcón reposa en calma.
Los gatos
no te recuerdan
entre melodías extrañas
Desde que te fuiste
no echo de menos nada.
No hay nada que me falte
pues siempre estuviste
Ausente.
Y mientras pienso en ello
un vacio me atrapa.
Y mi cuarto parece un décimo
y en segundos del cielo me baja.
Vértigos y nauseas
Mi dosis me falta.
Ilusión:
Bendita pastilla
de felicidad etérea
Quimera de inocentes.
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